La verdad incómoda del feminismo radical en México
Aborto, paridad, ideología de género… ¿Defensa de la mujer o manipulación social? Es hora de cuestionar lo que nos han impuesto.
El 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, ha sido una fecha de conmemoración y de fuerte debate a nivel internacional.
Las exigencias de grupos, colectivos y movimientos feministas radicales durante las últimas décadas, han sido puntuales en los temas como: despenalización del aborto, violencia contra la mujer, igualdad entre hombre y mujer frente a la participación política y laboral. Las preguntas que hoy nos hacemos son:
¿Han sido actores del cambio que predican?
¿Son sólo acciones para sensibilizar, concientizar respecto a una ideología?
¿Son fines políticos y económicos para grupos específicos?
Prioridades del feminismo en el siglo XXI y su alcance social
Despenalización del aborto como prioridad
Desde la década de 1970, las feministas mexicanas han promovido el llamado 'derecho al aborto' como un asunto de justicia social, una cuestión de salud pública y una aspiración democrática.
La despenalización del aborto en México ha sido, es y seguirá siendo una causa impulsada por el movimiento feminista, el cual ha ganado terreno a lo largo de los años. En 2007, organizaciones como el Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE), cuyo principal objetivo es la despenalización del aborto, desempeñaron un papel determinante en el debate a favor de esta causa dentro de la entonces Asamblea Legislativa del Distrito Federal, hoy Congreso de la Ciudad de México. Como resultado de estas acciones, el 24 de abril de 2007 se despenalizó el aborto en la capital del país.
Este hecho representa el cumplimiento de la principal demanda del feminismo del siglo XXI en México.
Lee sin límites por $99 al mes. Al dar clic en "Suscríbete", selecciona pago mensual para que el cobro sea por $99 cada mes. ¡Súmate hoy!
Participación política
El voto en las urnas es el primer paso para la participación política y, en México, la mujer tuvo acceso a este derecho el 17 de octubre de 1953, después de que la ONU hubiera llamado a los países miembros a reconocer los derechos políticos de las mujeres. 1
Comenzamos con el “principio de paridad de género”, el cual se utiliza para “garantizar la igualdad entre hombres y mujeres en el acceso a puestos de representación política”. 2 Este se implementó en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; en la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales y en la Ley General de Partidos Políticos. Su objetivo es que en los diferentes niveles de gobierno haya una representación 50% mujeres y 50% hombres.
En 2010, la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó la resolución mediante la cual se crea ONU Mujeres como entidad para la Igualdad de Género y el Empoderamiento de la Mujer. 3 Con base en esta creación de la ONU, los gobiernos, incluyendo el de México iniciaron la tarea de aplicar en sus leyes este principio.
El principio de paridad de género en México comenzó a aplicarse de forma sistemática y efectiva durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, quien, mediante la reforma constitucional de 2019 y la implementación de políticas concretas, consolidó este principio en todos los niveles del gobierno, marcando un antes y un después en la representación política de las mujeres en el país.
La existencia en nuestras leyes del principio de paridad de género, fue influído por el colectivo Red Mujeres en Plural y activistas del feminismo radical como Patricia Mercado, Martha Tagle, Malú Micher.
Han avanzado en el cumplimiento de su objetivo en forma parcial.
Violencia de género
El 1o de febrero de 2007, el presidente de México, Felipe Calderón Hinojosa, firmó la “Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia”, la cual establece mecanismos de protección a mujeres y las castigos para los agresores. Desde ese momento y hasta la fecha se han realizado diferentes reformas a las leyes existentes y han creado nuevas como: Ley Olimpia (2021) o la Ley Ingrid (2023).
Esta acción jurídica ha sido un trabajo en conjunto entre organizaciones feministas, legisladoras y organismos internacionales.
Los organismos Internacionales involucrados fueron: ONU Mujeres , la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y la Organización de los Estados Americanos (OEA).
Algunos de los colectivos feministas fueron: Católicas por el Derecho a Decidir (CDD); Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE) y Centro de Atención a la Mujer Trabajadora (CAMT).
Hay presencia de grupos nacionales e internacionales que promueven el feminismo radical, participaron en la creación de leyes para proteger a las mujeres de la violencia.
Igualdad laboral
“Ley General para la Igualdad entre Mujeres y Hombres”4 (2006), fue promovida por el entonces presidente Felipe Calderón Hinojosa y, a partir de su mandato los siguientes presidentes han promovido reformas a favor de la igualdad laboral.
Algunos de los colectivos feministas que impulsaron estas leyes: GIRE (Grupo de Información en Reproducción Elegida); Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad y, Las Constituyentes MX.
Diversos colectivos feministas realizaron acciones con el objetivo que se lograra la igualdad entre hombres y mujeres.
Conclusión
El debate sobre la participación de colectivos feministas en la vida pública y su influencia en la legislación sigue abierto. Si bien han logrados sus objetivos en temas como la paridad política, la protección contra la violencia y la igualdad laboral , también han impulsado agendas controversiales como la ideología de género en los temas, y acciones como la despenalización del aborto, lo cual no representa un logro para la mujer, ni para la sociedad mexicana.
Es innegable que la mujer ha ganado espacios en el ámbito político, social y laboral. Pero el verdadero reto no es solo la creación de leyes, sino su correcta aplicación y el equilibrio entre los derechos de la mujer y el respeto a valores fundamentales como la familia, la vida y la dignidad humana . La pregunta que debemos hacernos es si las políticas impulsadas en nombre del feminismo han sido efectivas para construir una sociedad más justa, o si han sido utilizadas como herramientas para dividir y confrontar a hombres y mujeres en lugar de promover una verdadera complementariedad y cooperación entre ambos .
Hoy, más que nunca, es crucial que quienes valoramos la vida, la familia y la dignidad humana tomemos acción. No podemos permitir que una ideología imponga sus “términos” sobre nuestra cultura, haciendo creer que la mujer que no es feminista es débil, poco preparada o se encuentra sometida.
¿Qué podemos hacer?
Informarnos y compartir la verdad. Contextos te ayuda en esta tarea, no obviemos que esto lo saben todos.
Apoyar iniciativas provida y profamilia. Acercarnos con los legisladores y dado el caso presionar en la defensa de los valores trascendentales.
Participar en el debate público. Todos hombres y mujeres.
Fortalecer a nuestras familias: La mayor resistencia a esta agenda ideológica se construye en el hogar y es la base fundamental del tejido social.
Apoyar a las mujeres que están interesadas en el debate político. Hoy más que nunca las necesitamos al frente.
México necesita avanzar en la protección de la mujer sin caer en la imposición de ideologías que no respetan los diferentes pensamientos y valores.